Cómo lidiar con la ansiedad por separación

Cómo lidiar con la ansiedad por separación

Con la vuelta al cole de nuestros hijos, surge entre madres y padres la conversación sobre la ansiedad por separación. Para quienes no sepan de qué se trata, es un problema que se presenta con la edad de desarrollo. Los síntomas pueden incluir una angustia recurrente y excesiva al dejar a los seres queridos o el hogar.

Con la pandemia, se ha pasado mucho tiempo en casa, por lo que no es de extrañar que este problema haya aumentado entre las familias en el último año. Los pequeños valoran mucho el tiempo que pasan en casa y cuando se les dice que ya no van a pasar sus días allí, a menudo puede causarles angustia.

La ansiedad por separación en cada etapa

  • Bebés. Cuando un bebé empieza a comprender la permanencia de los objetos, puede desarrollar ansiedad por separación. Empezarán a entender cuándo no está mamá. Esto puede hacer que se sientan inquietos. Una edad común para que esto ocurra es a los 9 meses. Intenta que las idas y venidas sean cortas y se ajusten a una rutina.
  • Niños menores de 3 años. No es de extrañar que en la etapa infantil nuestros pequeños sean más conscientes del aspecto de la separación. Cuando tienen entre 15 y 18 meses, pueden empezar a mostrar más desafíos y ansiedad. Cuando están cansados, hambrientos o no se encuentran bien, la ansiedad por separación puede ser más dura.
  • Preescolares. Alrededor de los 3 años, nuestros pequeños entienden más que nunca el aspecto de la ansiedad cuando se relaciona con la separación. La forma más fácil de tratar esto es hacer que las despedidas sean cortas y dulces. Y también intentar por todos los medios no volver tras la súplica del niño.

Nos hemos puesto en contacto con Jen, de @itsthefergusons, y nos ha contado cómo ayuda a su hijo con la ansiedad por separación con la vuelta al cole.

6 Consejos para lidiar con la ansiedad por separación

  • Lee. El libro El hilo invisible me pareció increíblemente revelador. Es un libro sobre las conexiones inquebrantables entre los seres queridos y ha curado a una generación de lectores.]
  • Escucha. Puede ser muy duro ver y escuchar a tu hijo molesto o enfadado. Intenta ver el mundo a través de sus ojos y asegúrate de que le haces ver que sus sentimientos son válidos.
  • Practica la atención plena o mindfulness. Es una habilidad que nos ayuda a afrontar las grandes emociones y las experiencias difíciles. Y, al igual que un músculo, es algo que podemos desarrollar con la práctica.
  • Dale un amuleto para que lo lleve consigo. Ya sea su colgante preferido, un llavero de dos partes del que cada uno tenga una mitad, o una pulsera a juego. Algo que puedan ver y tocar que les recuerde a ti puede aliviar la ansiedad.
  • Aceptación. Ignorar la ansiedad por separación no hará que desaparezca. De hecho, puede agudizarla. Por muy duro que sea (y la lucha es real), enfrentarse a lo que ocurre es el primer paso para afrontarlo de forma productiva. Pide ayuda a tu familia, amigos o profesores. No estás sol@.
  • Fuera culpas. Ignora la negatividad o los juicios de los demás. Cada niñ@ es únic@ y lo que funciona para un@ no funcionará para otr@. Acepta que la ansiedad no ha sido causada por nada que hayas “hecho mal”. Cuida de ti y de tu hij@.